El nivel de vida en cada lugar es diferente. En España tenemos ciudades en las que vivir resulta mucho más caro que en otras. Madrid, Barcelona, San Sebastián y Bilbao aparecen siempre a la cabeza del ranking de ciudades con un estilo de vida más caro.
Pero que no cunda el pánico; aunque vivas en una de esas ciudades, siempre hay margen para ahorrar. Te recomendamos que pruebes con estos consejos y acabarás este mes con más dinero en el bolsillo.
Son esos pequeños gastos que realizas a diario y de los que casi no eres consciente. El ejemplo más claro es el del café.
Si todos los días te tomas un café fuera de casa y te cuesta 1,20 €, si eliminas ese gasto al final de mes habrás ahorrado 24 €, lo que a final de año supone 288 € de más que podrás destinar a otras cosas.
Una de las grandes ventajas de vivir en una ciudad es que el transporte público suele funcionar bastante bien.
Si dejas el coche aparcado en casa no solo ahorras gasolina, sino que también evitas tener que pagar por estacionar, reduces los gastos de mantenimiento del vehículo y vives libre del riesgo de que te pongan una multa.
El precio medio del abono transporte en una ciudad está en torno a los 45 €, lo que es mucho más barato que el gasto mensual de realizar tus desplazamientos en coche.
Vivir en una ciudad y tener poco dinero no implica aburrirse; podemos aconsejarte muchas alternativas de ocio gratuitas.
Puedes visitar museos en los días de apertura gratis, hacer deporte al aire libre en algún parque, ir a presentaciones de libros, asistir con los niños a talleres gratuitos en algún centro comercial...
Pagar con tarjeta o con el móvil es muy cómodo, pero tiene el gran riesgo de no permitir controlar fácilmente lo que gastas.
Si en lugar de tirar de tarjeta usas dinero en efectivo serás mucho más consciente de lo que estás gastando y eso te ayudará a contenerte y no adquirir cosas que realmente no necesitas.
Esta forma de ahorrar te ayudará tanto si vives en una gran ciudad con precios elevados como si vives en una zona con un nivel de vida más asequible.
Con una sencilla hoja de cálculo puedes hacer tu contabilidad. Esto te ayudará a conocer lo que realmente estás gastando y a descubrir cosas en las que se te escapa el dinero.
Te aseguramos que una vez que tengas tus gastos controlados podrás llevar una mejor planificación de lo que tienes, lo que debes y lo que quieres ahorrar.