Deudas descontroladas: cómo evitar el apalancamiento. Consejos

Los mejores consejos financieros para evitar incurrir en deudas y lograr pagar los préstamos a tiempo

Muchas personas piensan que los problemas financieros únicamente afectan a las personas asalariadas. Esto no es así: muchos empresarios incurren en deudas, las cuales deben evitarse siguiendo unas pautas de gestión.

Si quieres evitar deudas, a continuación te ofrecemos algunos consejos muy interesantes.

Cómo evitar deudas

Muchas veces no solo se trata de dinero, sino de educación financiera. Lamentablemente, esta educación tan necesaria no se imparte en las escuelas; se aprende mediante la experiencia. Aprendemos qué gastar y cómo hacerlo, y muchas de estas lecciones se aprenden tras habernos dado de bruces con nuestro propio caos económico.

Tanto si has recurrido a préstamos como si estás pensando en ellos, debes tener en cuenta diversos consejos o factores que te pueden ayudar en las finanzas del día a día.

Asegúrate de que cuentas con más ingresos que gastos

Puede parecer obvio, pero existen muchas personas que no lo entienden o no lo quieren ver. El problema es no tener un control de los gastos y en poco tiempo contar con deudas "sin esperarlo". Para gastar menos, debes anotar en una hoja todos tus gastos y estimar el gasto medio mensual para saber en qué estás invirtiendo tu salario.

El ahorro como medida para evitar deudas

Después de realizar una comparación de gastos e ingresos, el ahorro es vital para conseguir la tan ansiada libertad financiera. Lo recomendable es que suponga un porcentaje fijo y continuo, mes a mes, que, por ejemplo, alcance el 30 % de todos tus ingresos. Este dinero ahorrado debe usarse únicamente para situaciones inesperadas o aprovechar oportunidades reales y beneficiosas.

Lucha contra cualquier tipo de apalancamiento

En este caso no solo hacemos referencia a las deudas que puedes contraer con cualquier entidad financiera. También con terceros, los cuales te prestan el dinero y, aunque no te impongan intereses, este tipo de créditos perpetua un círculo vicioso: el apalancamiento, es decir, ir poco a poco endeudándote hasta llegar a una situación insostenible.

Estudia cuándo pedir un préstamo y cuándo no hacerlo

No siempre es necesario pedir un préstamo. Por ello, debes analizar en todos los casos cuando es conveniente pedir capital prestado. Por ejemplo, contar con financiación externa sería productivo para comprar un bien como un coche, una casa o un electrodoméstico. Pero no sería adecuado para el pago de las vacaciones o para comprar un bien lujoso que no necesites.

Finalmente, es vital que te apliques en el cumplimiento de estos consejos para evitar deudas. Gracias a ellos podrás desmarcarte de futuros problemas con entidades financieras y también con la devolución de los préstamos pendientes. Se trata, en suma, de utilizar el sentido común y no contradecir aquella norma universal que estipula que no hay excedente sin ahorro.